Alicia
¡Entregado otro nuevo retrato!
Esta vez mi inspiración me ha llevado al blanco y negro…
En este tipo de retratos, hasta el último instante, siempre me queda la duda de si gustará o no… Creo que es el mismo dilema que se le plantea a la persona retratada cuando se encuentra conmigo en el momento de la entrega. Esa vacilación, ese “cómo salgo de ésta si no me gusta”, es la esencia de lo que yo hago y que pone el estómago en situación de alerta ante lo inesperado: el factor sorpresa y la valiente decisión de arriesgar.
A mi siempre me va a gustar, porque lo he creado yo, ha salido de mi y digamos que yo lo he parido y jamás entrego cosas que no me gustan. Pero claro, para gustos los colores y nunca puedes saber al 100%, ni adivinar, si será recíproco.
Una vez más lo ha sido y otra “osada” mujer aceptó el reto y se sumergió en este desafío. Agradezco infinito a Alicia su paciencia posando y la valentía por haber confiado en mi a ciegas, que es de lo que se trata: esperar sin saber qué plato saldrá de esta cocina.
¡Alicia, me ha encantado retratarte!
Un abrazo enorme lleno de inspiración y os invito a “experimentar” y a probar nuevos platos…