“To Be… Or Not to Be?”
Tuve una especie de visión antes de crear el retrato de Carlos Pinedo (actor). En esta vida que tenemos cuando creamos, me vino a la imaginación el conocido soliloquio de Hamlet sobre la vida y la muerte después del fallecimiento de su padre, el Rey de Dinamarca. Original ¿? No… Pero tenía que hacer algo que tuviera que ver con ello; tenía que aparecer Hamlet, tenía que aparecer una calavera -no es que aparezca en esa escena, pero si en la infinidad de carteles y cuadros que la representan- y todo ello dentro de un ambiente siniestro, oscuro, tenebroso; un clarísimo blanco y negro… Pero era menester intercalar también un toque de humor, como corresponde a la personalidad de Carlos.
Tenía que agitar todo eso para descolocarlo, de manera que aparecieran los ingredientes en la posición que yo buscaba: ya no era una calavera, eran dos esqueletos y la cabeza de Hamlet sobre una de las huesudas manos de uno de ellos. Los esqueletos ya habían tomado la decisión de inhalar su existencia para trasladarle a su antro, con la consiguiente cara de sorpresa de la cabeza de Hamlet, que ya no tiene la capacidad de decidir sobre si vivir o morir…
Y este es el resultado, que hay que ver también con un poco de humor, a pesar del impacto y la fuerza de la imagen 😉